No hay duda alguna que una buena higiene personal es importantísima en la ganadería porcina. Ayuda a reducir el riesgo de introducción de enfermedades. Por eso, un protocolo de higiene claro es indispensable para cada granja de cerdos.
Para garantizar la higiene personal en las granjas de cerdos, se pueden implementar diferentes medidas de higiene. Ducharse no es obligatorio por ley, pero es bastante preferible. Lo que sí es obligatorio para todo criador de cerdos es: un vestuario adecuado para las personas que se adentren al terreno.
UNA CUBETA O ALFOMBRILLA DESINFECTANTTE
Para reducir la posibilidad de introducir patógenos, los visitantes deben aparcarlo en la vía pública o en el aparcamiento indicado. Deben poner cubrebotas de plástico sobre su propio calzado o ponerse unas botas propias. Antes de adentrarse a la planta o al vestuario, el visitante debe utilizar la cubeta o la alfombrilla desinfectantes para realizar una desinfección previa.
DUCHARSE A SER POSIBLE
En las empresas donde existe la posibilidad de ducharse, es preferible tomarse una tanto al entrar como al salir de la nave. Se deben lavar a fondo las manos y el pelo al ducharse. Las joyas, los relojes de pulsera y, a ser posible, también los teléfonos móviles deben dejarse fuera de la nave. Después de ducharse, el visitante se pone ropa y botas limpias de la empresa. El calzado de la empresa debe desinfectarse mediante los cepillos para botas o la cubeta desinfectante; después, podrá adentrarse a la nave.
LAVARSE Y DESINFECTARSE LAS MANOS
En las empresas donde no haya duchas, el visitante debe ponerse los zapatos o las botas de la empresa y, a ser posible, también, vestirse con la ropa de la empresa. También debe vestirse con un mono de la empresa; se pueden usar también monos desechables. Deben lavarse bien las manos y, si fuera necesario, también desinfectárselas. Las botas se desinfectan con los cepillos para botas o la cubeta desinfectante antes de adentrarse en la nave. Si fuera necesario, se pueden usar guantes, una mascarilla y una redecilla. Cada medida implementada conseguirá reducir aún más el riesgo de introducción de patógenos.
UNA SEPARACIÓN ESTRICTA ENTRE «SUCIO» Y «LIMPIO»
Es muy importante una separación estricta entre la zona «limpia» y la zona «sucia» para evitar la propagación de patógenos. La ropa y el calzado que se traigan fuera de la empresa no deben entrar en contacto en ningún caso con la ropa limpia de la empresa. Incluso después de la visita ala la nave, la ropa y las botas de la empresa deben mantenerse aparte para evitar que salga cualquier patógeno presente en la empresa. Por eso, al salir de la nave deben desinfectarse otra vez las botas y se deben dejar la ropa y las botas en el lugar indicado. Preferiblemente, se tomaría otra ducha o se volverían a lavar y desinfectar las manos. También al salir del vestuario o de la empresa se vuelve a usar la cubeta o alfombrilla desinfectante para desinfectar las zapatillas o las botas personales.
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