Una lavadora de cajas lava cajas; para eso está hecha. Pero para que pueda seguir haciendo bien su trabajo, la lavadora de cajas también debe limpiarse diariamente. Así que no se olvide de dedicar tiempo a ello todos los días.
Una vez lavada la última caja del día, es hora de limpiar la lavadora de cajas. Lo más probable es que no sea una tarea que tenga muchas ganas de hacer, pero es sumamente importante. Si omite esta limpieza, pone en riesgo la seguridad de los alimentos que procesa en su empresa. En efecto, una lavadora de cajas sucia es una fuente de bacterias, por lo que sus cajas ya no saldrán limpias de la lavadora. Además, con una limpieza diaria, alargará considerablemente la vida útil de su lavadora.
Si su lavadora de cajas está funcionando las 24 horas del día, planifique un momento específico para limpiar la lavadora.
Limpiar dentro y fuera
Si se toma en serio la limpieza de su lavadora de cajas, entonces debe planificar, dependiendo del tamaño de la lavadora, cada día el tiempo suficiente para llevarla a cabo. Las siguientes tareas forman parte de la limpieza:
- Drenar el depósito de agua abriendo la válvula de esfera del desagüe.
- Limpiar el depósito de agua con la lanza de limpieza con espuma (en principio, 20 bar es suficiente). Tenga cuidado con los sensores. Hay que limpiarlos, pero no use demasiada presión.
- Limpiar los elementos calefactores (si los hubiere) para que no se incruste suciedad ni cal (estas pueden ocasionar que se queme el elemento calefactor).
- Retirar a mano cualquier suciedad en la cadena y el filtro.
- Revisar las boquillas. Limpiar cualquier boquilla bloqueada (son fáciles de retirar, limpiar y volver a colocar). ¡Limpiar semanalmente o mensualmente todas las boquillas no es un lujo innecesario!
- Limpiar con chorro de agua el exterior de la lavadora de cajas (tenga cuidado con los sensores, como los sensores de la puerta y los que se encuentran en la pantalla de mando: limpiarlos solo con un paño).
- Limpiar la zona en la que se encuentra la lavadora (suelo y paredes) para evitar la formación de bacterias.
El depósito de agua de la lavadora se vuelve a llenar con agua limpia cuando se pone en marcha otra vez el proceso de lavado.
Revisión visual
Para mantener óptimo el funcionamiento de la lavadora de cajas, es importante realizar una revisión visual diaria durante el lavado de las cajas. Revise, por ejemplo, que funcionen todos los sensores, que no haya fugas o que ninguna de las boquillas esté bloqueada. También es importante comprobar que la cadena este bien tensada. Especialmente en las lavadoras nuevas, la cadena puede soltarse levemente quedando así demasiado suelta.
Piezas en existencias
Para poder garantizar la continuidad de la lavadora de cajas —y, por tanto, la continuidad de su proceso de producción—, se aconseja tener diferentes piezas en existencias para poder sustituirlas directamente si surge algún defecto. Ejemplos de esas piezas son sensores de nivel, válvulas magnéticas y una manguerita para productos químicos (en caso de que se use una bomba de productos químicos).
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